La Secretaría Ejecutiva de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres –SE-CONRED- y el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología –INSIVUMEH-, mantienen el monitoreo al desplazamiento del polvo de Sahara en el mar Caribe, así como la presencia de partículas sobre el territorio nacional.
Ambas instituciones mantienen la comunicación con entes regionales e internacionales, así como la verificación que lleva a cabo la Universidad de Atenas de donde se obtienen las imágenes satelitales que sirven para los análisis correspondientes en el país.
Ambas instituciones mantienen la comunicación con entes regionales e internacionales, así como la verificación que lleva a cabo la Universidad de Atenas de donde se obtienen las imágenes satelitales que sirven para los análisis correspondientes en el país.
Monitoreo que realiza la Universidad de Atena por el polvo de Sahara
Este tipo de fenómeno ha ocurrido en años anteriores y se presenta al momento de ocurrir tormentas de arena en el desierto del Sahara en África y el viento las eleva a la atmósfera transportando la nube de polvo hacia la región centroamericana.
Las partículas son transportadas por el viento Alisio –viento del NorEste-. En otras ocasiones este fenómeno se presenta en el continente europeo y la concentración de éstas no se consideran perjudiciales para la salud, de acuerdo con un boletín informativo del INSIVUMEH.
Tomando en cuenta que actualmente se continúan presentando lluvias en los departamentos de Petén, Norte de Huehuetenango y Quiche, así como en Alta Verapaz e Izabal, las condiciones favorecen para la disipación de las partículas limpiando el aire.
Las partículas son transportadas por el viento Alisio –viento del NorEste-. En otras ocasiones este fenómeno se presenta en el continente europeo y la concentración de éstas no se consideran perjudiciales para la salud, de acuerdo con un boletín informativo del INSIVUMEH.
Tomando en cuenta que actualmente se continúan presentando lluvias en los departamentos de Petén, Norte de Huehuetenango y Quiche, así como en Alta Verapaz e Izabal, las condiciones favorecen para la disipación de las partículas limpiando el aire.
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