Conoce las señales que el cuerpo refleja al estar en situaciones de estrés
Cuida los dientes del desgaste irreversible: BRUXISMO
El estrés es el conjunto de reacciones fisiológicas que se presentan en estados de tensión nerviosa, física y emocional como producto de diversas situaciones en el ámbito laboral o personal.
Existen 4 tipos de estrés:
Estrés normal: es la reacción fisiológica que el organismo padece ante diferentes situaciones.
Estrés post- traumático: Se presenta después de haber experimentado un suceso aterrador, como un accidente, un desastre natural o el haberse involucrado en una situación que llevó las emociones al límite.
Estrés laboral y/o estudiantil: es el producto de las reacciones emocionales y físicas que se presentan cuando las exigencias en el ámbito profesional superan los recursos y capacidades del trabajador o estudiante.
Estrés patológico: suele presentarse de modo intenso y en períodos prolongados, desencadenando problemas psicológicos y físicos.
Muchas veces los síntomas del estrés suelen confundirse con otras enfermedades o padecimientos como dolor de cabeza, insomnio, presión arterial alta, acné, depresión o ansiedad, además de las contracturas musculares o el bruxismo que se produce al apretar la mandíbula de forma constante, producto también del estrés.
Hábito involuntario e inconsciente de tensar, chocar o rechinar los dientes de forma continua durante el día y noche; como consecuencia del mismo, se sufre del deterioro del esmalte dental que los recubre y protege, predisponiendo los dientes a fracturas o astillamiento, causando así hipersensibilidad aguda.
Además, se puede experimentar debilitamiento de las encías, ya que, al experimentar presión continua, las encías pueden inflamarse y volverse más propensas al sangrado.
Según data el 10% al 20 % de la población mundial presenta este hábito y el 100 % puede bruxar en algún momento de su vida, afecta del 15 al 23 % de la población adulta y se reporta en el 14% de la población de los niños y el 3% en pacientes mayores de 60 años.
Los principales indicios del padecimiento del bruxismo son el rechinado de dientes, dolor en el rostro y oídos, desgaste dental, tensión en la zona de la mandíbula y el aumento de los músculos maseteros o bien conocidos músculos de la masticación desencadenando dolor al masticar.
Como tratamiento del bruxismo existen varias maneras de contrarrestar los efectos, la principal es asistir con un odontólogo, en Clínicas Sonrie hay expertos que podrán evaluar cada caso y recomendar un Guarda Dental Anti Estrés, un accesorio que se puede utilizar de noche y de día y ayuda a calmar y pausar los síntomas del bruxismo.
El uso constante de un Guarda Dental Anti Estrés además de reducir la manifestación del bruxismo en el paciente, mejora y proporciona una situación que permite a las articulaciones adoptar una posición más estable, protegiendo las estructuras dentarias, brindando sostén de fuerzas anormales que puedan desgastar o alterar las piezas dentales, desbloquea los músculos del rostro haciendo que estos se relajen; protege el esmalte de los dientes y no permite que se estas se fracturen.
El promedio de uso de la Guarda anti estrés es de 6-9 meses, según los cambios que se sufran o el nivel de estrés. Es importante tomar en cuenta los cuidados respectivos para tratar el padecimiento de manera correcta y adecuada para preservar la salud y vida de los dientes.
Te recomendamos realizar tu consulta lo antes posible, pues en casos avanzados, es necesario rehabilitar protésicamente las piezas dentales para recuperar la posición articular idónea debido a dicho desgaste.
Para evitar daños irreversibles, recuerda visitar periódicamente al dentista.
Cuida los dientes del desgaste irreversible: BRUXISMO
El estrés es el conjunto de reacciones fisiológicas que se presentan en estados de tensión nerviosa, física y emocional como producto de diversas situaciones en el ámbito laboral o personal.
Existen 4 tipos de estrés:
Estrés normal: es la reacción fisiológica que el organismo padece ante diferentes situaciones.
Estrés post- traumático: Se presenta después de haber experimentado un suceso aterrador, como un accidente, un desastre natural o el haberse involucrado en una situación que llevó las emociones al límite.
Estrés laboral y/o estudiantil: es el producto de las reacciones emocionales y físicas que se presentan cuando las exigencias en el ámbito profesional superan los recursos y capacidades del trabajador o estudiante.
Estrés patológico: suele presentarse de modo intenso y en períodos prolongados, desencadenando problemas psicológicos y físicos.
Muchas veces los síntomas del estrés suelen confundirse con otras enfermedades o padecimientos como dolor de cabeza, insomnio, presión arterial alta, acné, depresión o ansiedad, además de las contracturas musculares o el bruxismo que se produce al apretar la mandíbula de forma constante, producto también del estrés.
El bruxismo
Hábito involuntario e inconsciente de tensar, chocar o rechinar los dientes de forma continua durante el día y noche; como consecuencia del mismo, se sufre del deterioro del esmalte dental que los recubre y protege, predisponiendo los dientes a fracturas o astillamiento, causando así hipersensibilidad aguda.
Además, se puede experimentar debilitamiento de las encías, ya que, al experimentar presión continua, las encías pueden inflamarse y volverse más propensas al sangrado.
Según data el 10% al 20 % de la población mundial presenta este hábito y el 100 % puede bruxar en algún momento de su vida, afecta del 15 al 23 % de la población adulta y se reporta en el 14% de la población de los niños y el 3% en pacientes mayores de 60 años.
Los principales indicios del padecimiento del bruxismo son el rechinado de dientes, dolor en el rostro y oídos, desgaste dental, tensión en la zona de la mandíbula y el aumento de los músculos maseteros o bien conocidos músculos de la masticación desencadenando dolor al masticar.
Como tratamiento del bruxismo existen varias maneras de contrarrestar los efectos, la principal es asistir con un odontólogo, en Clínicas Sonrie hay expertos que podrán evaluar cada caso y recomendar un Guarda Dental Anti Estrés, un accesorio que se puede utilizar de noche y de día y ayuda a calmar y pausar los síntomas del bruxismo.
El uso constante de un Guarda Dental Anti Estrés además de reducir la manifestación del bruxismo en el paciente, mejora y proporciona una situación que permite a las articulaciones adoptar una posición más estable, protegiendo las estructuras dentarias, brindando sostén de fuerzas anormales que puedan desgastar o alterar las piezas dentales, desbloquea los músculos del rostro haciendo que estos se relajen; protege el esmalte de los dientes y no permite que se estas se fracturen.
El promedio de uso de la Guarda anti estrés es de 6-9 meses, según los cambios que se sufran o el nivel de estrés. Es importante tomar en cuenta los cuidados respectivos para tratar el padecimiento de manera correcta y adecuada para preservar la salud y vida de los dientes.
Te recomendamos realizar tu consulta lo antes posible, pues en casos avanzados, es necesario rehabilitar protésicamente las piezas dentales para recuperar la posición articular idónea debido a dicho desgaste.
Para evitar daños irreversibles, recuerda visitar periódicamente al dentista.
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