La esquizofrenia está dentro de los 10 padecimientos más incapacitantes de acuerdo a la Organización Mundial de Salud (OMS) y es considerada la enfermedad mental más costosa para la sociedad.
Esta nueva alternativa terapéutica que ayuda a pacientes con esquizofrenia a reintegrarse a la sociedad. Al ser de aplicación mensual el paciente no requiere de la toma diaria de medicamentos orales, lo que facilita el apego al tratamiento.
Ciudad de Guatemala, 27 de agosto de 2013. El Palmitato de Paliperidona es un medicamento inyectable de aplicación mensual, efectivo en el control de los síntomas de la esquizofrenia, que ayuda a mejorar el apego al tratamiento de quienes enfrentan este trastorno psiquiátrico. El Palmitato de Paliperidona está disponible en Guatemala bajo la marca Invega® Sustenna®.
La esquizofrenia es un padecimiento crónico e incapacitante porque las crisis se presentan de manera recurrente, y las manifestaciones de perdida de funcionalidad se aumentan a través del tiempo. Se caracteriza por generar síntomas conocidos como “positivos” que incluyen delirios, alucinaciones y pérdida de contacto con la realidad y “negativos” dentro de los cuales están apatía, embotamiento emocional y falta de expresión.
De acuerdo a la Dra. Carmen Martínez, Directora Médica de Janssen para Venezuela, Centro América y el Caribe “el gran reto de los médicos que tratan esta enfermedad es lograr el apego al tratamiento y evitar recaídas en los pacientes con esquizofrenia”.
Esta nueva alternativa terapéutica que ayuda a pacientes con esquizofrenia a reintegrarse a la sociedad. Al ser de aplicación mensual el paciente no requiere de la toma diaria de medicamentos orales, lo que facilita el apego al tratamiento.
Ciudad de Guatemala, 27 de agosto de 2013. El Palmitato de Paliperidona es un medicamento inyectable de aplicación mensual, efectivo en el control de los síntomas de la esquizofrenia, que ayuda a mejorar el apego al tratamiento de quienes enfrentan este trastorno psiquiátrico. El Palmitato de Paliperidona está disponible en Guatemala bajo la marca Invega® Sustenna®.
La esquizofrenia es un padecimiento crónico e incapacitante porque las crisis se presentan de manera recurrente, y las manifestaciones de perdida de funcionalidad se aumentan a través del tiempo. Se caracteriza por generar síntomas conocidos como “positivos” que incluyen delirios, alucinaciones y pérdida de contacto con la realidad y “negativos” dentro de los cuales están apatía, embotamiento emocional y falta de expresión.
De acuerdo a la Dra. Carmen Martínez, Directora Médica de Janssen para Venezuela, Centro América y el Caribe “el gran reto de los médicos que tratan esta enfermedad es lograr el apego al tratamiento y evitar recaídas en los pacientes con esquizofrenia”.
En los estudios realizados para demostrar la eficacia y seguridad del nuevo fármaco, sólo el 6.1% de los pacientes descontinuaron el uso del medicamento por efectos adversos1, lo que demuestra un alto perfil de seguridad y tolerabilidad. Palmitato de Paliperidona está presente en 42 países alrededor del mundo.
En Guatemala, según un estudio de la Organización Mundial de la Salud de 2006, el 61% de las admisiones en unidades de hospitalización psiquiátrica de base comunitaria son mujeres y el 6% son niños o adolescentes. Los diagnósticos de las admisiones correspondían principalmente a: trastornos del estado de ánimo (49%) y esquizofrenia (17%).
A pesar de existir diversos tratamientos disponibles, se calcula que el riesgo de una recaída es del 20 al 40% después de un año de tratamiento con anti psicóticos orales3, 4.
Asimismo, dos terceras partes de los pacientes con esquizofrenia cumplen de manera parcial o no cumple con la toma de sus fármacos, por lo que el riesgo de recaída aumenta casi 5 veces5.
Las recaídas pueden evitarse con el seguimiento adecuado de un tratamiento farmacológico, sin embargo se ha demostrado que hasta el 80% de los pacientes presentan nuevas crisis psicóticas por falta de apego a su tratamiento. Es así, como uno de los retos más importante en el tratamiento de la esquizofrenia es lograr una mayor adherencia a los medicamentos anti psicóticos.
La atención de un paciente con estas características requiere de cuidados farmacológicos, así como de atención psiquiátrica y psicológica, sobre todo en las etapas de crisis cuando el paciente pierde el contacto con la realidad y presenta alucinaciones y delirios.
La nueva alternativa terapéutica ofrecida por Janssen, Palmitato de Paliperidona, es una opción innovadora, de aplicación mensual, que hace uso de la tecnología de Nanocristales® para mantener una concentración adecuada de la sustancia activa en el cuerpo del paciente6, lo que mejora la tasa de apego al tratamiento y ayuda a evitar recaídas constantes.
Palmitato de Paliperidona al ser una terapia inyectable de acción prolongada, ofrece niveles sanguíneos constantes durante largos períodos de tiempo que pueden ayudar a reducir la falta de adherencia al tratamiento, disminuyendo el riesgo de recaída. “Esta clase de medicamento ayuda a reducir el sufrimiento de pacientes, familiares y cuidadores causados por cada recaída y también puede ayudar a proteger el cerebro contra los efectos tóxicos de las recaídas acumuladas a través del tiempo.”, agrego la Dra. Martinez.
Palmitato de Paliperidona actúa inhibiendo los efectos de los neurotransmisores dopamina y serotonina que se relacionan con la aparición de síntomas “positivos” y “negativos” de la esquizofrenia. En el tratamiento con Palmitato de Paliperidona se emplean jeringas pre llenadas que están listas para usarse y que no necesitan refrigeración.
De acuerdo a un estudio publicado en The Journal of Mental Health Policy en 2007, de los pacientes tratados con Palmitato de Paliperidona, el 90% de los pacientes no presento recaída,7 lo que significa un gran avance en la atención de estos pacientes.
“Cada recaída significa la posibilidad de una pérdida paulatina de las capacidades mentales que dificulta cada vez más la reintegración del paciente a una vida normal. Por lo anterior, un medicamento como éste puede ayudar a mejorar significativamente la calidad de vida del paciente y de la persona que lo cuida”, puntualizó la Dra. Martínez.
En general, las consecuencias del pobre funcionamiento psicosocial por causa de la esquizofrenia son numerosas y amplias, desde el subempleo, limitaciones en relaciones sociales, interrupciones en la educación y aislamiento social, hasta actividades criminales y problemas con el sistema legal, estrés familiar y abuso de sustancias.
El apego al tratamiento también tiene una implicación en el impacto económico de la enfermedad, que va desde gastos directos relacionados con hospitalización, atención médica y psiquiátrica, necesidades de rehabilitación y apoyo social, hasta los costos indirectos como resultado de la pérdida de la productividad (desempleo, incapacidad, ausencia del trabajo, jubilación temprana y mortalidad prematura).
Este nuevo medicamento para la esquizofrenia ha sido aprobado por la Dirección General de Regulación, Vigilancia y Control de la Salud del Ministerio de Salud Pública de Guatemala y ya puede ser prescrito por los especialistas en Guatemala.
Janssen cuenta con una larga historia en el desarrollo de medicamentos innovadores en el área de psiquiatría que inició en 1958 con el descubrimiento del Haloperidol, antipsicótico de primera generación, considerado uno de los grandes avances en Psiquiatría. Con este lanzamiento, Janssen busca contribuir al bienestar de los pacientes a través del desarrollo de medicamentos innovadores para el tratamiento de padecimientos devastadores como la esquizofrenia.
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Acerca de Janssen
Janssen, compañía farmacéutica de Johnson & Johnson, está dedicada a satisfacer y resolver las necesidades médicas más importantes aún no resueltas en la actualidad, entre las que se encuentran las enfermedades infecciosas (por ejemplo, VIH/SIDA, hepatitis C y tuberculosis, esta última, en fase de investigación), oncológicas (por ejemplo, mieloma múltiple y cáncer de próstata), inmunológicas (como artritis reumatoidea, enfermedad de crohn, espondilitis anquilosante, psoriasis), neuro-psiquiátricas (por
ejemplo, esquizofrenia, demencia y dolor), y las enfermedades cardiovasculares y metabólicas (como la diabetes, la cual también se encuentra en fase de investigación)
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