Un nuevo informe revela el coste social "oculto" de los elevados precios de los alimentos

Un informe de Oxfam Internacional y el Institute of Development Studies (IDS), publicado hoy, constata el inicio de una nueva era marcada por la volatilidad y el alza de los precios de los alimentos, que están provocando cambios significativos en la sociedad.

El informe Al límite evidencia la mayor presión a la que se ven sometidas las familias y las comunidades debido al aumento continuado de los precios de los alimentos durante los últimos cinco años y que, sin embargo, no se ha visto reflejado de forma paralela en un incremento de los salarios.

Así, se han detectado diversas consecuencias como el aumento de los casos de violencia doméstica,
un mayor abuso del alcohol y las drogas, importantes cambios en la mano de obra –dado que las personas se ven obligadas a abandonar la agricultura para dedicarse a profesiones mejor pagadas pero más peligrosas, como la minería – y un deterioro de la vida comunitaria ante el aplazamiento de eventos sociales significativos como, por ejemplo, las bodas. Además, el informe también señala que las personas se ven obligadas a saltarse comidas o a consumir productos más baratos y de peor calidad (a veces, incluso, contaminados) para poder salir adelante.

Este es el primero de cuatro informes anuales en los que se analiza como los elevados y volátiles
precios de los alimentos afectan al bienestar de las comunidades urbanas y rurales en diez países:
Bolivia, Guatemala, Bangladesh, Pakistán, Burkina Faso, Etiopía, Kenia, Zambia, Indonesia y
Vietnam.

El investigador de Oxfam, Richard King, afirma: "Ya sabemos que las personas pobres de todo el mundo sienten la presión causada por los precios elevados y volátiles de los alimentos, desde enfermeras en Zambia que se ven obligadas a pluriemplearse como vendedoras callejeras para llegar a fin de mes, a hogares en el Reino Unido que deben pedir dinero prestado o ahorrar para poder comprar comida. Pero ahora somos conscientes de que, además, tienen consecuencias que van más allá del ámbito alimentario y que están provocando un cambio social que debemos comprender mejor y abordar para que las comunidades puedan salir adelante".

Entre las conclusiones más importantes figuran las siguientes:
• La seguridad alimentaria se ha convertido en una creciente preocupación para las familias, que se ven obligadas a comprar alimentos más baratos, de peor calidad e, incluso, contaminados para poder llegar a fin de mes.
• Cada vez más personas emigran del campo a la ciudad o a otros países para encontrar más oportunidades económicas. En Etiopía se atribuyó al aumento de los precios de los alimentos que la gente emigrara a Oriente Próximo.
• El incremento de las tensiones familiares –derivado de la imposibilidad de muchos hombres para cumplir con el papel tradicional de ser quien proporciona sustento al hogar– se refleja en un aumento de los casos de violencia doméstica y del abuso de alcohol y drogas.
• El aumento de los costes y de la imprevisibilidad de los beneficios provoca que muchos agricultores abandonen esta profesión para desempeñar empleos mucho más peligrosos como la minería en Burkina Faso o la pesca en la jungla en Bangladesh.
• La vida comunitaria se deteriora a medida que las familias reducen las celebraciones de eventos significativos para la vida de la comunidad, como las bodas o los funerales, con el objetivo de ahorrar dinero.
• La disminución del presupuesto familiar también está provocando que un número cada vez mayor de mujeres se incorpore al mercado de trabajo, lo que obliga a abuelos y abuelas o a las hijas más mayores a ocuparse del cuidado de los menores.
• Las familias también admiten saltarse comidas, buscar formas alternativas de conseguir alimentos o cultivar los suyos propios. En Bangladesh, las personas recurren a recetas para paliar el hambre como el pantabhat, un plato a base de arroz fermentado y aguado.

Este revelador informe analiza una nueva era marcada por la volatilidad y los elevados precios de los
alimentos, que dio comienzo con la crisis alimentaria de 2007/2008. Los precios de los alimentos
continúan siendo extremadamente elevados y volátiles y son las personas más pobres del mundo –
quienes destinan hasta un 80% de sus ingresos a la compra de alimentos– quienes resultan más
perjudicados.

Naomi Hossain, investigadora de IDS, apunta: "A medida que las familias tienen cada vez más dificultades para ganar dinero suficiente para comer, vemos como el dinero adquiere una importancia mayor que las relaciones, hasta el punto de tener implicaciones sociales potencialmente alarmantes. Quienes están involucrados en el desarrollo de políticas deben ser conscientes de esto".

El informe recomienda, entre otras medidas, mejorar las políticas de protección social para abordar la
vulnerabilidad de las personas más pobres a través de, por ejemplo, transferencias de dinero o subsidios. También se necesita una mejor gestión de las reservas de alimentos y una mayor regulación del comercio internacional de cereales, así como hacer de la agricultura una vocación viable incrementando la inversión en iniciativas de capacitación, tecnología y sostenibilidad. Además, es necesario reconocer la necesidad de dar apoyo a quienes se ocupan del cuidado de los menores, especialmente a los abuelos y abuelas y a las hijas más mayores, cuya salud o educación pueden verse afectadas.

Datos de contacto
Para más información, puede ponerse en contacto con:
Alex Castillo, Oxfam en Guatemala, jguzman@oxfam.org.gt ó +502 30319003/ +502 22055262

Notas para los editores:
Al límite es el primer informe elaborado en el marco del estudio de investigación La vida en una
época de volatilidad de los precios de los alimentos, que se desarrollará a lo largo de cuatro años. El
estudio consiste en el seguimiento de una serie de indicadores de seguridad alimentaria en todo el
mundo, en visitas anuales a 23 comunidades urbanas y rurales, y en el análisis de datos estadísticos nacionales para obtener una visión general de cómo se ve afectada la población de un determinado
país.

Para consultar el informe (EN), haga clic aquí:

http://www.oxfam.org.uk/~/media/EB6AF3601CF94BEDBBD7CE42D674DC12.ashx

Institute of Development Studies (IDS) es una organización benéfica internacional, líder en
investigación, enseñanza y comunicación sobre desarrollo internacional. Nuestra visión consiste en
un mundo en el que no exista la pobreza, prevalezca la justicia social y en el que el crecimiento
económico esté enfocado a mejorar el bienestar humano. Creemos que los estudios de investigación
pueden contribuir a impulsar el cambio necesario para alcanzar esta visión. Para más información,
visita: www.ids.ac.uk

Oxfam Internacional es una confederación internacional de 17 organizaciones que trabajan conjuntamente con el objetivo de encontrar soluciones duraderas a la pobreza y la injusticia. A través
de su campaña CRECE-Vamos al grano, Oxfam en Guatemala trabaja para contribuir a arreglar un
sistema alimentario roto.

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